Casa o Geriátrico: "En casa mientras se pueda, en la residencia geriátrica cuando se deba"
Ante este nuevo escenario las residencias geriátricas comenzaron a proliferar en casi todo el mundo. Al principio eran consideradas como la única alternativa asistencial.
En los países más desarrollados surgió el modelo de hotel de lujo, en donde las residencias se esmeraban por brindar servicios en sus prestaciones al igual que un hotel ofreciendo un gran tamaño de instalaciones y servicios meramente asistencialista. El gran tamaño fue criticado duramente en años posteriores hasta nuestros días, por ser considerados únicamente con el fin de lograr economías de escalas y alta productividad a costa de la personalización y calidez hogareña.
En la Asamblea Mundial del Envejecimiento realizada en Viena en el año 1982, se solicitó a los gobiernos de los distintos países, que los servicios de ayuda domicilio comiencen a considerarse como alternativa a institucionalizaciones muchas veces innecesarias. En ese momento surgieron repudios a la gran cantidad de personas que se albergaban en las residencias, la poca integración con la comunidad, etc.
Así el proceso de “desinstitucionalización” comienza hasta el punto de que Dinamarca en el año 1987 prohíbe la construcción de geriátricos tradicionales. Mediante esta ley se buscó dar prioridad a viviendas adaptadas en donde se consideró: eliminación de las barreras arquitectónicas, el servicio de teleasistencia y la integración en la comunidad. A finales de los años noventa el 8% de habitantes de Dinamarca mayores de 65 años vivía en este tipo de residencias.
Las nuevas ideas de “envejecer en casa” no apuntan a una única respuesta a todas las situaciones, por el contrario, se impulsan alternativas para la contención dentro del hogar mientras sea posible y realizar el traslado a una residencia u otro tipo de alojamiento cuando la situación lo amerite, brindando un abanico de alternativas acordes a las necesidades de cada adulto mayor. El lema a seguir sería entonces “en casa mientras se pueda, en el geriátrico cuando se deba”.
Sin embargo, los servicios que hacen posible la contención en la propia vivienda del adulto mayor no están muy difundidos ni desarrollados por los gobiernos y tampoco por entidades privadas, sobretodo en los países menos desarrollados. Las residencias geriátricas deberían ser un servicio más dentro de las posibilidades con las que cuenta el adulto mayor, en donde en algunas situaciones será considerado como un servicio de larga duración y definitivo, pero también debería incorporarse un modelo que permita la residencia temporaria por distintas situaciones que pueda transitar el adulto mayor y/o sus familiares.
En síntesis: los servicios de ayuda a domicilio, viviendas protegidas, centros de día, estancia diurna considerado también como programas de “respiro de las familias”; deben ser parte integrante de un sistema gerontológico que también contemple las residencias geriátricas como hogares permanentes. Estos últimos son sumamente necesarios en algunas situaciones, por lo que no deben negarse ni rechazarse; todo lo contrario, la tendencia debería ser la normalización y regulación para que cumplan los requerimientos y estándares mínimos en pos de lograr el objetivo de brindar calidad de vida y dignidad a los adultos mayores.
¿Dónde formarse para dirigir un servicio geriátrico?
La dirección de servicios para la tercera edad requiere formación especializada con ética y profesionalismo a fin de brindar calidad de vida al adulto mayor y su familia.
Desde Gerontologica.com, especilizados en formación y asesoría en gerontología, te sugerimos el Curso Dirección de Servicios Gerontológicos, de formación multimedial online, constituye un portal de acceso, para todas las personas de habla hispana, hacia la especialización a fin de brindar mejores servicios a nuestros envejecientes.
Los autores, Prof. Dr. Hugo Valderrama, refente internacional en geriatría y gerontología y la Prof. Contadora MBA Ángeles Valderrama, gerente de distintos servicios gerontológicos, combinan, a través de sus disciplinas formativas, las dos grandes áreas de gestión: Médica y Administrativa, logrando la integración de los conocimientos claves para la Dirección de los Servicios Gerontológicos.
¿Dónde puedo profundizar mis conocimientos en Geriatría y Gerontología?
Desde Gerontologica.com te sugerimos el Curso Superior en Geriatría y Gerontología de 4 meses de duración. El Director del curso el Dr. Hugo R. Valderrama, médico geriatra, director de la Licencitura en Gerontología de la Universidad Católica SF, vuelca sus conocimientos y experiencias de más de 40 años de profesión en una lectura amena.
La Gerontología como ciencia es relativamente novedosa, y su importancia radica en la necesidad de abordar la problemática de la población adulta mayor, que ha experimentado un crecimiento demográfico exponencial. Sumada a este crecimiento poblacional, se presenta la realidad de las personas mayores que, a diferencia de lo que ocurría hasta hace muy poco tiempo, experimentan condiciones de vida mucho más plenas y autónomas. Su objetivo, entonces, no es solo la prolongación de la vida sino que su preocupación es mejorar la calidad de esa vida.
Es por esto que afirmamos que la gerontología debe abordarse como un estudio multi e interdisciplinar que se nutra de los aportes de distintas áreas del conocimiento. La biología, la sociología, la psicología, la antropología, la demografía, la educación, la teología, la arquitectura, y otros campos del saber contribuyen en hacer de la gerontología un campo del conocimiento independiente.